
Que el hombre muestre en la vida
la astucia que Dios le dio.
Aquello no era trabajo,
mas bien era un ajunción...
¡Ricuerdo ... ¡que maravilla!
como andaba la gauchada,
siempre alegre y bien montada
y dispuesta pa el trabajo...
Pero hoy en día... ¡barajo!
no se la ve de aporriada.